En la Plaza Bolívar de la ciudad de Valera.

Los hechos políticos antidemocráticos que se desarrollaron en el país el 11 de abril del año 2002, una vez más, fueron rechazados por los militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), en la Plaza Bolívar de la ciudad de Valera.

A ésta manifestación pacífica en la localidad valerana, en rechazó de las pretensiones de un minúsculo grupo de militares insubordinados, de derogar la Constitución de La República Bolivariana de Venezuela, se sumó el aguerrido pueblo en general, que tampoco estuvo de acuerdo en aquel entonces, con romper con el hilo constitucional por el que toda la vida han luchado.

En la actividad, los manifestantes pronunciaban consignas antiimperialistas, e hicieron un llamado a la conciencia de los apátridas, para que desecharan las pretensiones de continuar con tan nefastas ideas, que obstaculizan el impulso del país, hacia el camino de la autosuficiencia y el desarrollo sustentable que tanto se desea.

Algunos camaradas gritaban «gringo go home», y recordaban a las masas presentes, los anhelos del Gobierno de Norteamérica, de consolidarse como el policía del mundo, a través de las diferentes bases militares que han estado instalando en todo el globo terráqueo, como las últimas siete que levantaron en la hermana República de Colombia.

Uno de los presentes, fue Román Cardoza, quien recordó que la nueva centaura americana, y el Gobierno de George W. Bush, siempre han intentado absorber todo lo que se refiere a lo del ámbito energético, y a todo aquello que representaba para ellos, el patio trasero de Norteamérica, como lo es Latinoamérica.

Monopolio

Para Cardoza, Venezuela como punto energético, juega un papel importante para el gobierno norteño, desde hace unas cuantas décadas atrás, por lo que ellos, no van a pretender soltar tan fácilmente la posibilidad de seguir manteniendo y alimentando energéticamente su nación, con los beneficios naturales que le proporcionó la providencia a ésta Patria de Venezuela.

Señaló Cardozza, que detrás de los fatídicos hechos del 11 de abril, está por su puesto, la mano inequívoca del gobierno norteamericano, dado que el títere de Carmona Estanga, representaba en el país los intereses oscuros de aquella esa nación que fue profetizada por Simón Bolívar, como aquella tierra que traería desolación y desencanto entre los habitantes de los países sureños.

«El 11 de abril del 2002, es histórico para la soberanía venezolana, para el pueblo venezolano, conociendo ya lo que es la revolución y ese socialismo que está naciendo, porque el pueblo se da cuenta que hay un país imperial, que busca la manera de absorber todos los aspectos energéticos de esta bella patria», dijo.

«La oligarquía siempre ha existido y siempre va a seguir existiendo, pero en algún momento nosotros vamos a llegar a un determinante impacto y a acabar con éste capitalismo dinosaurio que siempre hemos tenido consecuentemente. Todo 11 de abril tiene un 13», adujo el militante socialista del PSUV.

Tarzán Júnior Hernández/CNP 11.141
Prensa Alcaldía
Gráficas: Luís Romero